¿Qué necesita un niño y cómo le fallamos?

Más allá de las necesidades básicas de un niño existen una serie de necesidades relacionales que requieren de otra persona intuitiva que las pueda satisfacer. Lamentablemente muchas veces fallamos.

 

Richard Erskine, director del Institute for Integrative Psychotherapy resumió magistralmente las necesidades de todos los niños a nivel relacional.

 

¿Cuáles son las necesidades de un niño a nivel relacional?

 

• Seguridad. Saber que no será lastimado físicamente, humillado y que sus necesidades básicas serán satisfechas. Poderse sentir protegido en su vulnerabilidad física y emocional.

 

• Validación. Que se tome en serio la experiencia subjetiva del niño. Sentirse visto e importante.

 

• Aceptación por parte de una persona estable, confiable y en quien se puede depender y admirar

 

• Experiencia compartida. Estar con alguien que entienda por lo que está pasando. Alguien que se eche en el suelo a jugar con él y que le explique su propia experiencia.

 

• Autodefinición. Poderse expresar desde su propia opinión aunque discrepe. Tener espacio para su singularidad

 

• Causar un impacto. Saber que pueden generar un impacto en los padres. Esto no significa controlarlos pero si afectarlos. Que los padres puedan tener sintonía con los estados emocionales.

 

• Que el otro tome la iniciativa. Conseguir que el otro de el primer paso y saber que hay alguien disponible fuera.

 

• Expresar amor. Tener a alguien que reciba el afecto, gratitud o estima.

 

Lo interesante es que estas necesidades no se limitan sólo a la infancia, sino que son necesidades relacionales en todas las etapas evolutivas. Para poderlas satisfacer requieren de otra persona ya que no se pueden autosatisfacer.

 

¿Cómo fallamos?

• Si no hablamos de sus emociones
• Cuando nadie lee sus necesidades y reacciona de forma flexible ante ellas
• Si no les ayudamos a poner palabras a sus sensaciones corporales
• Cuando nadie le hace compañía al niño y juega con él a su nivel
• Cuando el niño no tiene una persona constante a su lado
• Si el niño es constantemente “definido”. “Tú eres así”

 

Es fundamental saber que todos cometemos estas negligencias. A veces es porque estamos cansados u ocupados; otras veces porque no tenemos más herramientas. Lo importante no es juzgar lo que hacemos mal sino poder ser conscientes de la oportunidad de reparar en esos lugares donde no llegamos. Así podremos transmitirles el mensaje de lo importante que es la relación para nosotros.

 

¿Qué pasa cuando no se pueden satisfacer las necesidades?

 

• Si las necesidades relacionales de un niño son repetidamente ignoradas el niño aprende a compensarlas. Es decir, el niño se adapta “la vida es así” “yo no necesito eso” “yo no merezco eso”.

 

• Las maneras de compensar crean patrones que estructuran a la persona y generan lo que se conoce como el guión de vida que puede afectar en las futuras relaciones. De esta forma, el adulto entra a la relación con un bagaje del pasado que entorpece el encuentro.

 

• En los casos en que un niño no tuvo el acompañamiento de un traductor emocional cuando es adulto no sabe poner palabras a sus emociones y por lo tanto transmitirlas a una pareja por ejemplo. Es probable que tampoco sepa darle importancia a las sensaciones o señales emocionales de otros.